El autorreconocimiento es subjetivo. Cada persona tiene una vivencia interna e individual sobre su género, que puede corresponder o no con su sexo asignado al nacer.

Puede ocurrir que las personas decidan realizar intervenciones quirúrgicas o tratamientos hormonales para adecuar su cuerpo a su identidad autopercibida, pero este no es siempre el caso.

Además, la identidad de género comprende otras expresiones de género, como la vestimenta, los accesorios, el maquillaje o la manera de caminar y hablar.

Entonces, cada persona decidirá cómo quiere que la llamen y puede que use diferentes términos en distintas situaciones. Si tienes la posibilidad, presta atención o pregunta. Es un primer paso para respetar las vivencias y decisiones personales.

Es decir, no presentar únicamente un modelo en el que solo se incluye a personas heterosexuales y cisgénero. Por el contrario, tener en cuenta la diversidad de las personas que componen cualquier sociedad.

Es clave comunicar que existe una variedad de géneros, vínculos sexo-afectivos y estructuras familiares. Sin embargo, tradicionalmente se ha considerado que a un sexo femenino o masculino le corresponde un género femenino o masculino, respectivamente. De la misma forma, se espera que haya una atracción sexual por el sexo o género socialmente considerado opuesto.

De esta manera, se invisibiliza a quienes no encajan en ese paradigma. MODII te propone adoptar un enfoque de respeto, defensa y difusión de los derechos de las personas que componen el colectivo de la diversidad sexual y de género.

Durante mucho tiempo, las personas solo han considerado y reconocido únicamente dos géneros absolutos: el femenino y el masculino.

No obstante, el hecho de sentirse perteneciente a una identidad de género depende de cada persona y sus circunstancias. Hay personas agénero, bigénero, transgénero o de género fluido, entre otras.

En este sentido, no alcanza con usar técnicas como el desdoblamiento, las barras y los paréntesis o el signo arroba. Habrá personas que no se identifiquen ni con la ‘a’ ni con la ‘o’.

MODII propone las siguientes alternativas para escribir mensajes sin marca de género y no dejar a nadie afuera:

Muchas veces, no se tiene la intención de discriminar ni de hacer daño. Sin embargo, el desconocimiento, los prejuicios y los estereotipos se interponen en nuestros discursos.

MODII te propone revisar algunos imaginarios en relación con la diversidad sexual y de género:

Esto implica poner en duda términos y expresiones que se han usado tradicionalmente. También implica discutir opciones y proponer fundamentos.

En este punto, no solo hay que tener en cuenta la denotación de las palabras, sino también su connotación y la intención con la que se usan. Es decir, los significados y las asociaciones culturales y emocionales que conllevan.

MODII te propone cuestionar y reformular algunas formas de nombrar. Pero ten cuidado: ¡este puede ser un camino de ida!

Ni en chistes, ni con humor, ni en público ni en privado. Estos términos son ofensivos, insultantes y humillantes.

El 17 de mayo de 1990, la Organización Mundial de la Salud decidió quitar a la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales. Unos años después, en 2004, la Organización de las Naciones Unidas proclamó este día como el Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia. Por este motivo, la Alianza Gay y Lésbica Contra la Difamación comenzó a considerar el término como una palabra ofensiva. En lugar de decir que alguien es homosexual, se prefieren los términos gay, hombre gay, lesbiana, persona gay.

Sin embargo, algunos hombres continúan usando los términos homosexual y homosexualidad por su carga política e histórica. De hecho, son parte constitutiva del nombre de organizaciones y movimientos.

También está vigente el debate sobre el hecho de cambiar la palabra «fobia» por el término «odio», con el fin de evitar términos patologizantes en una población patologizada históricamente. Esta propuesta genera posiciones encontradas.

Por un lado, hay quienes están de acuerdo con el cambio, siempre y cuando se aplique para todas las fobias, como «xenofobia», «aporofobia», etc. Por otro lado, hay quienes mencionan que es importante no desconocer el cambio recorrido por ciertos términos para ser posicionados en la agenda pública, tales como «homofobia», «LGTBIfobia».

En ese sentido, pareciera que la sociedad civil avanza progresivamente en la incorporación de nuevos conceptos, a la par que sigue haciendo uso de terminología previa. Incluso, quizás haya conceptos que puedan coexistir en periodos de transición.

La Red Internacional por la Despatologización de las Identidades Trans y la campaña Stop Trans Pathologization (STP) impulsan que el tercer sábado de octubre se celebre el Día Internacional por la Despatologización Trans.

Los objetivos principales de la campaña son los siguientes:

– Denunciar la psiquiatrización de las identidades trans.

– Abogar por los derechos sanitarios de las personas trans.

– Lograr un cambio de paradigma en el que se respete que no hay nada que tutelar, normativizar ni curar en relación a las identidades de género.