ARV es la abreviatura de antirretroviral, aunque el correcto uso para referirse a este término es medicamento antirretroviral. Este tipo de fármacos se utiliza para tratar el VIH y reducir la carga del virus en el organismo de las personas que viven con el VIH. Este fármaco ayuda a proteger el sistema inmunitario, además de prevenir que el VIH avance a otras etapas y se convierta en el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).
En la actualidad, existe un número amplio de fármacos antirretrovirales para tratar el VIH. Estos medicamentos deben administrarse según ciertas pautas. Si se utilizan de manera irregular, la infección puede progresar y las opciones de encontrar un tratamiento efectivo disminuyen. El tratamiento con fármacos antirretrovirales es un tratamiento de carácter indefinido.
Algunas personas que toman este tipo de fármacos experimentan efectos secundarios, como malestar o vómitos. Por ello, es necesario apoyar, acompañar y atender a través de los servicios de salud a las personas que realizan este tratamiento.