El viejismo es el conjunto de estereotipos, prejuicios y discriminación hacia las personas mayores solo por el hecho de serlo. Se puede manifestar de varias maneras, como en actitudes, comportamientos, narrativas o acciones.
El viejismo se ejerce contra las demás personas y también es autoinfligido. Lo anterior implica que, de tanto oír los mismos discursos viejistas, las personas mayores los van creyendo.
Las consecuencias del viejismo para las personas mayores son, entre otras:
- Menor esperanza de vida.
- Menos salud física y mental.
- Menor capacidad para recuperarse de la discapacidad.
- Mayor deterioro cognitivo.
- Menor calidad de vida.
- Más aislamiento social y soledad.
- Más restricciones para expresar la sexualidad.
- Más riesgo de violencia y maltrato.
Revertir estas consecuencias tiene impactos positivos para las personas mayores y, además, para toda la sociedad.
Referencias:
Organización Mundial de la Salud. Informe mundial sobre el edadismo.
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