La descolonización es un proceso de independencia de los pueblos del mundo sometidos al colonialismo. Un movimiento cada vez más amplio de representantes indígenas y tribales, de personas activistas y defensoras de derechos humanos, inclusive de importantes líderes espirituales, como el Papa Francisco I, reconoce la naturaleza revolucionaria de este planteamiento. Por ello, opinan que el papel central que tiene el dinero en nuestras sociedades debe cambiar radicalmente para así poner fin a la exclusión e inequidad que una economía basada en la acumulación del dinero genera; entre otras cosas, mata, excluye y destruye a la Pachamama. La descolonización impone replantear este modelo.
En la historia reciente de América Latina, este replanteamiento ha alimentado el surgir de nuevas visiones políticas y nuevas propuestas. En países como el Estado Plurinacional de Bolivia y en Ecuador, este replanteamiento se ha sustentado en la soberanía, en el autogobierno, la autonomía y la libre determinación de los pueblos, y en el desmontaje del sistema hegemónico de dominación capitalista y sus prácticas excluyentes y discriminatorias. Por ello, hablar de descolonización es hablar del desmantelamiento del nuevo colonialismo y del patriarcado, lo que abre el camino hacia el horizonte del Buen Vivir, Vivir Bien.
Referencias:
Irene León. Revista América Latina en Movimiento, No 474 (2012). La descolonización inconclusa.
El Papa al Encuentro de los Pueblos: Tareas para la Descolonización (2018).
Créditos de fotografía al Banco Central de Bolivia